Faltan 5 pa las 12 viene el año nuevo amor y esperanza
Faltan 5 pa las 12 viene el año nuevo amor y esperanza
para bajar la música entrar aquí |
Las campanas de la iglesia están sonando anunciado que el año viejo se va
Alegría del año nuevo viene ya los abrazos se confunden sin cesar
Las campanas de la iglesia están sonando anunciado que el año viejo se va
La alegría del año nuevo viene ya los abrazos se confunden sin cesar
faltan cinco pa las doce el año va a terminar
Voy corriendo pa mi casa a besar a mi mamá
SE ACERCA UN NUEVO AÑO
Dicen que cuando se acerca fin de año los ángeles curiosos se sientan al borde de las nubes a escuchar los pedidos que llegan desde la tierra.
– ¿Qué hay de nuevo? -pregunta un ángel pelirrojo, recién llegado.
Lo de siempre: amor, paz, salud, felicidad…- contesta el ángel más viejo.
Y bueno, todas esas son cosas muy importantes.
Lo que pasa es que hace siglos que estoy escuchando los mismos pedidos y
aunque el tiempo pasa los hombres no parecen comprender que esas cosas
nunca van a llegar desde el cielo, como un regalo.
¿Y qué podríamos hacer para ayudarlos?
– Dice el más joven y entusiasta de los ángeles.
¿Te animarías a bajar con un mensaje y susurrarlo al oído de los que quieran escucharlo?
– pregunta el anciano.
Tras una larga conversación se pusieron de acuerdo y
el ángel pelirrojo se deslizó a la tierra convertido en susurro y
trabajó duramente mañana, tarde y noche, hasta 1os últimos minutos del último día del año.
Ya casi se escuchaban las doce campanadas y el ángel viejo
esperaba ansioso la llegada de una plegaria renovada.
Entonces, luminosa y clara, pudo oír la palabra de un hombre que decía:
“Un nuevo año comienza. Entonces, en este mismo instante,
empecemos a recrear un mundo distinto,
un mundo mejor: sin violencia, sin armas, sin fronteras,
con amor, con dignidad; menos policías y más maestros,
menos cárceles y más escuelas,
Unamos nuestras manos y formemos una cadena humana de niños, jóvenes y adultos,
hasta sentir que un calor va pasando de un cuerpo a otro, el calor del amor,
el calor que tanta falta nos hace.
Si queremos, podemos conseguirlo, y
si no lo hacemos estamos perdidos,
porque nadie más que nosotros podrá construir nuestra propia felicidad”.
Desde el borde de una nube, allá en el cielo,
dos ángeles cómplices sonreían satisfechos.
Del libro: “Cuentos para Niños de 8 a 108 II” – Pancho Aquino