La rosa azul poema amor sublime celeste mis manos ¡Que goce triste este de hacer todas las cosas como ella las hacía! Se me torna celeste la mano, me contagio de otra poesía Y las rosas de olor, que pongo como ella las ponía, exaltan su color; Continue leyendo Comparte esto:TweetMásPocketImprimirRedditMe gusta esto:Me gusta Cargando...