Tribulacion Amor iba en el viento como abeja de fuego ¡Mira! De cuántos ojos veía abiertos sobre mis sendas tempraneras, sólo los tuyos quedan. Pero se van llenando, de un cuajo de neveras… Continue leyendo Comparte esto:TweetMásPocketImprimirRedditMe gusta esto:Me gusta Cargando...